Acabó la liga para el Madrid que, dicho sea de paso, es el único que me importa. Un fracaso vaticinado desde el principio por La Guinda y cuyos culpables principales son, por este orden, Florentino el Depredador, Ancelotti el blandito y la panda de macarras de muchas de sus estrellas.

A mi el Madrid, ahora que estamos en temporada, me recuerda a Curro Romero que sólo servía para torear gatos y, aún así, de vez en cuando. Los hinchas de uno y otro son igual de descerebraos. Con una oreja de ciento en viento o la victoria sobre el Bayern o el Barsa…a vivir del cuento. Al propio Barsa le sucedía lo mismo hace tiempo que, con tal de haber ganado al Madrid en el año, le daba igual descender o hacer el ridículo. El Atleti, que juega como los niños de colegio, pero que le echa lo que hay que echarle, está donde le corresponde.

No obstante, que Juan López Hontanar, mi compañero y sin embargo amigo, no se confíe. Le vamos a ganar la champions como último esfuerzo para que los Benzemás y Benzemenos sigan viviendo del cuento. Si no gano no puedo cortarme el bigote porque no tengo pero al lunes siguiente en vez de ir al Tribunal me largo al trullo.

Luego están las elecciones, que me tienen de los nervios. Lo sorprendente no es que la peña, como se dice ahora, se abstenga. Lo que sorprende es que haya alguno que vote. El Parlamento Europeo es algo que han inventado para colocar enchufaos a millón el watio. No sirve, ni siquiera lo pretende, absolutamente para nada. La candidata no sabe decir sino que ella es muy buena y los demás muy malos y el candidato, que por lo menos sabe de lo que habla, nos deja ver que su intención es irse a la Comisión, lugar donde se manda no se sabe en nombre de quién. Total que nos toman el pelo llamando a nuestro deber de votar. Que les den a esta cuadrilla de burócratas parásitos.

Las mujeres son seres tan excepcionales o despreciables como los hombres pero consideradas globalmente, si es que se puede hacer esto, han tenido peor suerte. Como las eligen sus enemigos así les va. En Madrid padecemos a una Fugitiva Florero y a la Botella Florero. De la primera ya hemos dicho de todo y de la segunda baste señalar su última ocurrencia. No contenta con quitarnos La Castellana todos los domingos, con los fines más disparatados y contrarios a las leyes de régimen local, de pronto va y se pone a organizar ¡¡¡¡carreras de caballos¡¡¡¡ y yo me digo ¿por qué no las organiza en el pasillo de su casa con Josemari y los niños ? y ¿nos devolverá el IBI por las carreras y el resto de tonterías ?. Esta mujer crea alarma social andando tan vueltecita. Aznar haría cosas malas y peores pero lo de dejarnos a esta prenda no tiene perdón de Alá.