El D.N.I. y las carreras populares

El movimiento se demuestra andando. Sabia verdad que tiene poco que ver con el Ministro del Interior que padecemos. Sucede que, como cantidad de españoles, he perdido el D.N.I. Soy el único culpable de mi propia negligencia pero tampoco es para que me crucifiquen, mal comparao pero metáfora al gusto del preboste que, como sabéis, pertenece a una secta religiosa de turbios antecedentes pero muy en boga.

Hasta aquí normal, dado mi edad provecta y una más que preocupante tendencia al despiste. Lo que no es normal es lo que sucedió a continuación. Primero a la oficina del DNI donde me comunican que están colapsados y me dan cita para varios días después. Sigue siendo más o menos normal porque tanta informática que pagamos y al final las cosas se deben hacer con una máquina a vapor. Lo peor viene después: es necesario pasarse por comisaría para denunciar el trascendental hecho de la pérdida. Tres visitas, tres, por exceso de aforo y, al final, un simple impreso que pasa por visita a recepción y entrevista con agente en su despacho.

El agente que me atendió, una señorita o señora en cuya presencia no me quiero extender, además amable, me explica que la policía no estima que el hecho sea denunciable pero que el DNI lo exige y ellos no pueden hacer nada. El funcionario de la Oficina me dice, en plan colegí, que se trata de una guerra de estadísticas que ambas partes pretenden aligerar. Y yo me pregunto que, dado que afecta a un mismo Ministro, si no sería posible que hiciera un hueco en sus obligaciones- rezar y condecorar a estatuas- y pasara a evitar las torturas burocráticas de los ciudadanos que le pagan su inmerecido sueldo. Se conoce que no es posible.

A otra cosa. La Alcaldesa de Madrid, un desastre, ha concluído que nada mejor que las carreras populares para ganar fama y nombre y ha puesto  los domingos a todos los ciudadanos a correr. Hasta ahí una gilipollez más. El problema surge porque aplica la famosa  teoría sindical de que una manifa no es manifa si no se jode a los ciudadanos cerrándoles la calle Alcalá y a ser posible Sol y la Gran Via, y a los comerciantes y resto de seres humanos que les den, que aquí hay mucha injusticia. Se conoce que tampoco se corre en los estadios, parques , etc…etc porque eso no es correr ni na. Esta señora debía de explicar la razón de que yo pague el IBI y ella saque el provecho de mi calle. El día que no es una maratón, es una bici o un carricoche pero si tienes algo que hacer en la ciudad vete despidiendo. Menuda mañanita me ha dado hoy. Tenía que haber oído lo que salía de esta boquita que se han de comer los gusanos.

Por ultimo, el Consejo ya hace política descarada bajo la revelación de san josemaría y su vicario en la tierra. Al Supremo Requero que llevaba años esperando el milagro. Con su pan se lo coma.

Anuncio publicitario
Esta entrada fue publicada en Sin categoría. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s